Como bien sabrás, si estás aquí leyendo esto, en la vida enfrentamos muchos riesgos que pueden tener un impacto profundo en nuestra salud, patrimonio y bienestar financiero. La urgencia por protegernos de estos imprevistos, nos lleva a buscar formas de abordar estas preocupaciones, y es aquí donde los seguros son una herramienta esencial para muchas personas y organizaciones. Pero, ¿cómo elegir el seguro adecuado según tus necesidades?
Ya sea por la gran oferta de posibilidades en el mercado o por la preocupación de dar un buen uso a tu dinero, esta es una pregunta bastante común. ¡Y hoy es tu día de suerte! Sabemos que encontrar una asesoría transparente y confiable es un desafío gigante, y más aún gratuita, pero tranquilo que estamos aquí para ayudarte.
En Probenefit nos especializamos en brindar asesoramiento en seguros y a lo largo de los años hemos resuelto con éxito esta y otras dudas. Este artículo te guiará a través de los tipos de seguros disponibles en el país y te proporcionará consejos valiosos para tomar una decisión informada.
Y en caso de cualquier otra consulta ¡Siempre puedes escribirnos! Comencemos.
Principales tipos de seguros disponibles en Chile
Antes de sumergirnos en el proceso para elegir un seguro, es importante conocer los principales tipos de seguros disponibles en Chile. Esto te permitirá identificar cuál se adapta mejor a tus necesidades específicas o cuál cubre de mejor manera tus preocupaciones. Aquí tienes una lista de algunos de los seguros más comunes en el país:
1. Seguro de Salud
El seguro de salud entrega un reembolso a la persona asegurada por los gastos médicos que haya tenido que pagar y que estén dentro de la cobertura contratada. Pueden ser individuales y colectivos, además, tienen una duración definida. Lo mejor de todo, es que son totalmente complementarios a cualquier cobertura que tengas desde tu Isapre o Fonasa.
Eso sí, pon mucha atención al momento de cotizar cualquiera de ellos, ya que los hay de diferentes tipos: para enfermedades graves o catastróficas, para salud dental, solo para hospitalización, entre muchos otros.
Puedes leer: Beneficios de un Seguro de salud para Pymes y sus trabajadores
2. Seguro de vida
El seguro de vida proporciona una suma de dinero, llamada indemnización, a los beneficiarios de la persona asegurada en caso de su fallecimiento. Eso sí, la causa de muerte tiene que estar cubierta por el contrato que firmas. Puedes elegir entre distintos tipos de seguros de vida, como seguro de vida entera, seguro temporal y seguro de vida universal.
Además, generalmente tienen un tope de edad. Es decir, solo puedes contratarlo si tienes menos años que el límite establecido. Ya después de eso, es prácticamente imposible. También, antes de contratarlo, es usual que te soliciten un informe médico para conocer tu estado de salud.
3. Seguro obligatorio de accidentes personales (SOAP)
Uno de los más populares y es que, si no lo sabías, este tipo de seguro es obligatorio para todos los vehículos en Chile. En caso de no tenerlo, te expones a multas por infracción a la Ley de Tránsito, además de que pueda ser quitado de circulación por Carabineros de Chile y puesto a disposición del Juzgado de Policía Local de la comuna que corresponda. Y de seguro no quieres eso.
El SOAP entrega cobertura en caso de muerte y por lesiones ocurridas en algún accidente donde el vehículo asegurado esté involucrado. De esta manera reembolsa los gastos médicos y hospitalarios en caso de necesitar atención sanitaria.
4. Seguro de automóvil o vehículo motorizado
A diferencia del SOAP, ofrece cobertura en caso de daños totales o parciales del vehículo involucrado en un accidente de tráfico. Y aquí igual mucho ojo, porque cualquier daño que no resulte de una colisión, normalmente queda fuera de la cobertura.
Eso sí, puedes contratar en conjunto o de forma separada, otras coberturas adicionales como son responsabilidad civil, robo, hurto o uso no autorizado del vehículo, y daños causados por fenómenos de la naturaleza.
5. Seguro de incendio para bienes inmuebles
Este seguro es uno de los que entrega mayor tranquilidad a las personas. Consiste en que se paga una indemnización en caso de pérdida total del inmueble a causa de un incendio. Y si solo fue daño parcial, el seguro paga las reparaciones que se necesiten.
También es uno de los seguros obligatorios que establece la ley, cuando el inmueble está asociado a algún crédito hipotecario y para los espacios comunes de los condominios.
¿Conocías estos seguros? Puedes consultar mayores detalles de estos y otros disponibles en Chile, en la página web educativa de la Comisión para el Mercado Financiero.
10 consejos para elegir un seguro en Chile
Ahora que conoces los principales tipos de seguros que encontrarás en el mercado chileno y cuál se podría acomodar mejor a tus necesidades, es hora de abordar la tarea de seleccionar la mejor alternativa. Aquí tienes una lista de consejos que te ayudarán a elegir un seguro:
1. Evalúa tus necesidades personales y oportunidades financieras
Antes de elegir cualquier tipo de seguro, estudia tus necesidades personales y analiza tu capacidad financiera. Esto es el primer paso para tomar una decisión informada y que puedas sostener a largo plazo. Lo importante aquí es la sinceridad contigo mismo.
Las siguientes preguntas te podrían orientar en esta búsqueda:
- ¿Qué riesgos enfrentas?
- ¿Qué cosas deseas proteger? ¿Cuáles son prioritarias?
- ¿Cuánto puedes gastar en el pago mensual de un seguro? ¿Tienes algún margen?
2. Compara diferentes compañías de seguros y sus planes
No te limites a una única compañía de seguros. Compara las ofertas de varias aseguradoras, los planes que ofrecen y analiza en qué se diferencian unas de otras. Pon especial atención a los beneficios, las cosas que no cubren y los valores mensuales. Si respondiste exitosamente las preguntas del punto anterior, tener claras todas las opciones disponibles te permitirá ordenar mejor tus expectativas y posibilidades.
3. Lee detenidamente los términos y condiciones
Antes de firmar un contrato de seguro, lee cuidadosamente los términos y condiciones. Comprende lo que está incluido y lo que no, las fechas y formas de pago, a quién recurrir en caso de cualquier problema y sobre todo, céntrate en todas las dudas que te surjan. Si las pueden responder y quedas satisfecho con ello, ¡felicidades! En tus manos tienes un contrato que puedes firmar con toda confianza.
Si necesitas mayor orientación, revisa nuestro artículo sobre cómo entender los términos y condiciones de un contrato de seguro.
4. Pide recomendaciones y opiniones
Pide recomendaciones a amigos, familiares y colegas que tengan experiencia en la compra de seguros. También puedes buscar reseñas en línea o consultar con asesores financieros. Mientras más profunda sea tu búsqueda, más información para elegir. Como dice el famoso dicho: conocer es poder.
5. Considera el servicio al cliente
El servicio al cliente es importante cuando necesitas activar tu seguro, presentar un reclamo o hacer preguntas sobre tu cobertura. Investiga la reputación de la compañía en términos de servicio al cliente, los canales de atención disponibles y los horarios de funcionamiento. Ten por seguro que manejar esta información te evitará un gran estrés.
6. Evalúa la solidez financiera de la compañía
Asegúrate de que la compañía de seguros tenga una sólida posición financiera a largo plazo. Esto es crucial para garantizar que puedan cumplir con sus obligaciones en caso de que llegues a necesitar activar un seguro.
Aprende más sobre esto con nuestro artículo: Qué es la clasificación de riesgo en seguros.
7. Pregunta sobre descuentos, promociones o beneficios extras
Algunas compañías aseguradoras, o empresas intermediarias, ofrecen descuentos por la compra de múltiples seguros o programas de puntos. También puedes preguntar sobre beneficios adicionales, como servicios de asistencia en carretera o programas de bienestar. El mercado está en constante expansión y la competencia hace que puedas encontrar grandes oportunidades.
8. Revisa tu contrato regularmente
El cambio es lo único fijo en la vida. A medida que cambia tu situación personal y económica, tus necesidades de seguro pueden evolucionar. Revisa tu contrato regularmente y ajusta tu cobertura según sea necesario. En todo caso, recuerda que no son contratos eternos, una vez vencidos, solo puedes elegir no renovar o preguntar por una mejora de tus condiciones.
9. Guarda en un lugar seguro la copia de tu contrato
Guarda copias de todas tus pólizas, contratos y documentos importantes en un lugar seguro y de fácil acceso. Esto facilitará el proceso en caso de tener que presentar un reclamo o activar un seguro. También, y sobre todo en caso de seguros de vida, elige a una persona de confianza que conozca dónde están estos documentos.
10. Solicita asesoría profesional
Si te sientes abrumado por las opciones y los detalles de los seguros, no te presiones ya que es algo muy común. Si te llega a suceder, considera la posibilidad de consultar a un asesor financiero o a un corredor de seguros. Ellos pueden orientarte de forma experta y resolver todas tus dudas.
Te puede interesar: Crisis de Isapres: Los beneficios de contratar un seguro de salud complementario
Contratar un seguro es un gran paso en tu crecimiento y bienestar personal. Esperamos puedas seguir todos estos consejos, ya que estamos confiados en que te permitirán construir una posición sólida desde la que tomar una decisión informada y garantizar tu tranquilidad. Y si tienes más dudas, ¡siempre puedes hablar con nosotros!
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